El Arte Del Suicidio

Veo entumecida como cae suicida entre mis dedos la sangre de una vida que va muriendo
Me siento fuera de mí por un instante… estoy en las delicadas manos de una Reina Santa
Sus palpitantes garras se clavaron en mi piel, suplicantes de redención
¿Cuántos pensamientos morbosos se estarán arrastrando en mi carne lacerada?
Estoy sosegada… pálida por el dolor que va perfumándome con un aroma a muerte
Son tantos las ilusiones que van muriendo en mi cabeza con divino éxtasis
Saturándome con extrañas sinfonías de una serenidad contenida
La paz comienza a invadirme con las baladas de una vieja añoranza
Pienso en los miles de corazones rotos que deje humillados en amargas primaveras
La claridad del sol hace de mí un mar de tinieblas desvanecidas
Que se van hundiendo en las pecaminosas mentes de jóvenes suicidas
Soy fugitiva de mi propia cárcel… ¿Por qué mi corazón aun esta tan roto?
Quiero mirar mi sangre… quiero mirarme morir como en mis placenteros sueños
No se porque vienen a mi mente las antiguas fantasías de ceniza oscura
Fueron tantos los años escuchando sus voces torturantes en mi cabeza
Fueron tantas las palabras murmuradas silenciosas en mis lúgubres noches
Fueron tantos los viejos recuerdos escritos en una piel que se volvió sangre por el sufrimiento
Soy fugitiva de mi propia cárcel… ¿Por qué mi corazón aun esta tan roto?
Siento el fluir toxico de mi sangre como una voz que me acaricia dulce
El silencio abre sus alas tomándome entre sus fríos brazos
Seductora me lleva donde los pecadores como yo duermen… donde renacen en cánticos
Fantástica y helada la muerte me llama ansiosa donde el sabor de la vida se pierde
Y como una virgen muerta me desvanezco en la oscuridad de una sombra adormecida