Hola Diciembre

El año 2018 está a semanas de terminar, y en todo este tiempo había dejado de tomarme un tiempo para reflexionar y decidir qué era lo que realmente quería hacer. Ciertamente una de las cosas que jamás pasaron por mi cabeza fue el volver a escribir, no porque ya no me gustara hacerlo sino porque algo muy dentro de mí me decía que no existía nada que pudiera sacar, como si la fuente donde brotaba la creatividad se hubiera secado para jamás volver a dar agua. Y ciertamente, por muchísimo tiempo me sentí así, sin ánimos y sin ganas, tomando literal lo que Pablo Neruda decía, que si no se está realmente conmovido por algo que NO escriba, y si, realmente no estaba verdaderamente conmovida para decidir a arriesgarme y volver a escribir. 

Este blog fue mí inicio en Internet, era muy joven cuando lo abrí y muy inocente también, pero realmente encontré en este espacio un lugar donde podía expresar lo que era y quién era yo a muchas personas que nunca me iban a conocer pero que al menos si iban a leer lo que escribía y eso era más que suficiente para mi. Realmente nunca fue un blog famoso ni tampoco alcanzo millones de seguidores, no fui el boom de las redes ni nada parecido, pero no era eso lo que yo añoraba alcanzar, yo solo quería un espacio en la inmensidad del Internet que solo me perteneciera a mí y lo encontré. Y actualmente me siento orgullosa de ello.

Pero en fin, no espero que nadie lea esto ni espero que alguien se alegre, obviamente solo es un diario personal, un escrito privado que dejaré en Internet anunciando que por mucho tiempo creí que era muy digna para este blog, y actualmente entendí que deje perder por varios años algo que me hacia ser yo completamente. Esta noche, un 1 de Diciembre de 2018, un día que se le da la bienvenida a la Navidad y a 14 días de iniciar una nueva vida, he decido volver a ser yo, escribir y armar de nuevo el rompecabezas de mí vida. Uniendo mis nuevas pasiones, mis nuevos proyectos, mis nuevos inicios a aquello que me hacia feliz. Ahora sé que puedo tener TODO  puedo tener a Dios y a Cristo en mí vida, a mí carrera enfermería en mí vida, a mí matrimonio en en mí vida, y a mí escritura en mí vida. 

"Los talentos no se pierden solo se olvidan". Hoy he decidido recordar los y ponerlos en práctica nuevamente. En fin, sin más que decir, me despido de mí misma, porque Esto fue escrito y redactado para mí, como un recordatorio de lo que HOY he decidido hacer.